Departamento de Prensa

/

28 de julio de 2020

Procuraduría inicia proceso para la captación de datos biométricos de internos penitenciarios que serán trasladados a La Nueva Victoria

Uno de los internos en el proceso de captación de sus datos biométricos

 

Destaca registros de datos biométricos de los internos contribuirá a lograr mayor eficiencia en la lucha contra la delincuencia y el crimen, ya que estará interconectado al sistema de las instituciones de seguridad del Estado, donde se actualizará en tiempo real, garantizando la información confiable y exacta de los privados de libertad.

SANTO DOMINGO.- La Procuraduría General de la República (PGR) dio inicio al proceso para la captación de datos biométricos de los internos de la Penitenciaría Nacional de La Victoria que serán trasladados próximamente al nuevo recinto que se construye en la comunidad de Las Parras del municipio San Antonio de Guerra y que entrará en funcionamiento en los próximos días como parte del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario.

Al ofrecer detalles sobre el proceso que lleva a cabo para la captación de los datos biométricos de los internos, la PGR explicó que una de las características de La Nueva Victoria es que contará con un sistema la captación de los datos biométricos de los internos, siendo la primera vez que se instaura en los recintos penitenciarios del país.

En ese sentido, detalló que trabajan en el levantamiento de información de los internos que serán trasladados al nuevo penal, al tiempo que informó que dicho levantamiento de información que se está llevando a cabo en el penal de La Victoria agilizará el proceso de captación de datos biométricos que será realizado una vez inicie el traslado e ingreso de los internos a La Nueva Victoria.

Tras explicar los detalles sobre la captación de datos biométricos, la institución dijo que serán ingresados a un sistema de datos las cédulas de identidad de los internos, así como la toma de huellas dactilares y de fotografías de alta resolución para el reconocimiento facial.

El órgano de justicia destacó que el registro de los datos de los internos representa un gran avance en la lucha contra la delincuencia y el crimen, ya que dicha base de datos estará interconectada al sistema de las instituciones de seguridad del Estado, donde se actualizará en tiempo real, garantizando la información confiable y precisa sobre los datos personales de los privados de libertad.

Resaltó que el novedoso sistema permitirá identificar a los privados de libertad con más rapidez y seguridad, logrando un mayor control y seguimiento desde su ingreso al recinto penitenciario para el cumplimiento de la prisión.

Sobre la obra, levantada en un terreno de 6,407,083 de M2, dijo que es la más grande construida en el marco de la implementación del Plan de Humanización para terminar con el hacinamiento y la sobrepoblación que por décadas han afectado a la actual Penitenciaría Nacional de La Victoria, que alberga actualmente a 7,130 privados de libertad, la mayor cantidad del sistema penitenciario nacional.

La institución destacó que La Nueva Victoria fue construida siguiendo lo establecido por la Organización de las Naciones Unidas en las Reglas Mínimas para el Tratamiento de los Reclusos, llamadas también Reglas de Nelson Mandela, para garantizar de forma efectiva la rehabilitación y reinserción social de los internos, y con ello cumplir con la finalidad de la pena de proteger a la sociedad contra el delito mediante la reducción de la reincidencia.

Señaló la PGR en ese orden, que los internos tendrán acceso a programas educativos y a terapias ocupacionales mediante su incorporación a talleres de producción agrícola e industrial, y dispondrán de servicios de salud y alimentación adecuada, además de que tendrán la oportunidad de participar en actividades recreativas, deportivas, culturales, y religiosas.

Dijo que el moderno centro penitenciario La Nueva Victoria, cuya administración y seguridad estará a cargo de más de 900 Agentes de Vigilancia y Tratamiento Penitenciario (VTP), además contará con los más altos niveles de seguridad, incluyendo un sistema de última generación, con cámaras por circuito cerrado, que garantizará un mayor control y vigilancia de los privados de libertad.