HERMANAS MIRABAL (República Dominicana).- La Fiscalía de la provincia Hermanas Mirabal, por intermedio de la Policía Nacional, capturó a un hombre que evadía la justicia desde 2017 y contra quien pesa una condena de tres años de prisión por robo agravado.

El órgano persecutor del sistema de justicia gestionó que Miguel Acosta Rosa, conocido como El Clásico, cumpla la referida sentencia condenatoria que le fue ratificada por la Suprema Corte de Justicia tras cometer un robo agravado en el municipio de Tenares en 2016.

El acusado fue capturado el pasado 25 de febrero, mientras circulaba por la calle principal del municipio de Villa Tapia, en cumplimiento a la orden de captura marcada con el auto número 136-01-2020-SAUT-00034, emitida por el Tribunal de Ejecución de la Pena del Distrito Judicial Duarte el pasado año, gracias a una ardua labor de inteligencia entre los organismos de seguridad del Estado.

En torno al hecho, el expediente indica que el 19 de agosto de 2016, en horas de la madrugada, el acusado penetró a la Escuela Salustio Morillo, ubicada en la calle 16 de agosto de la ciudad de Tenares, de donde sustrajo una batería, propiedad del centro educativo.

De acuerdo con la información emitida por el Ministerio Público, Acosta Rosa fue enviado al Tribunal de Ejecución de la Pena del Departamento Judicial de San Francisco de Macorís para cumplir la sentencia condenatoria que le impuso el Tribunal Colegiado de la Cámara Penal del Distrito Judicial de Hermanas Mirabal el 23 de marzo de 2017. Fue hallado culpable por haber cometido robo agravado.

El Ministerio Público detalla que Acosta Rosa se encontraba prófugo de la justicia desde 2017, en medio del proceso en su contra por violación a los artículos 379 y 384 del Código Penal Dominicano, que sancionan el robo. Su abogado defensor había recurrido en apelación la sentencia condenatoria a la Corte de Apelación de San Francisco de Macorís, recurso que fue rechazado por los jueces actuantes, quienes confirmaron el fallo impugnado.

No conforme con la ratificación de la condena, la defensa de Miguel Acosta Rosa depositó un recurso de casación ante la Suprema Corte de Justicia, en contra de la decisión de la Cámara Penal de la Corte de Apelación de San Francisco de Macorís, recurso que también fallado en su contra, lo que en consecuencia ratificó la condena de tres años de reclusión, que deberá cumplir en la cárcel pública Juana Núñez, de Salcedo.